El violinista en el tejado
Cuando vas a ver al teatro y el espectáculo te transmite emociones, estás en el lugar correcto.
“El violinista en el tejado” es una experiencia revitalizante.
La productora Bernstein-Peralta nos brinda una puesta en escena que desborda energía y talento.
El musical está basado en los cuentos “Las hijas de Tevye”, del humorista y novelista ruso, Sholem Aleijem, llevado a las tablas de Broadway por Joseph Stein, con música de Jerry Bock y letras de Sheldon Harnick.
Una obra que lleva más de 50 años en distintas carteleras por todo el mundo, merece ser vista, y en México, Bernstein-Peralta nos da la oportunidad de disfrutarla.
“Tradición” es la palabra clave de la obra. Y poco a poco, a través de los infortunios de Tevye, las tradiciones del pueblo ruso, Anatevka, se desmoronan ante sus ojos (y los de Dios).
Es una bonita historia de soltar el arraigo, de cambiar y evolucionar, porque a fin de cuentas, ninguna “tradición” será más importante que el amor que siente por sus hijas, y si para eso tiene que condescender y “dejar atrás”, pues que todo se quede atrás (los que tenemos hijos lo sabemos muy bien).
Alejandro Toporek tiene dominado el personaje de Tevye; se nota inmediato, pues a pesar de ser la primera función de esta reposición (que tuvo su temporada anterior de 2012 a 2015) su tempo mantiene al público carcajada tras carcajada, sin necesidad de exagerar. Es muy natural.
La tragedia de Tevye es nuestra entrada a la diversión. Su vida va bien, es pobre (y aunque no le molestaría tener encima la maldición de la riqueza), tiene una familia feliz.
Parece que la economía mejorará cuando el carnicero del pueblo pide la mano de una de sus hijas, pero de ahí en adelante, su vida se derrumba poco a poco, porque Tevye antepone el amor que siente por ellas, a toda “tradición”… Después, las justificaciones para con su esposa y para él mismo, mantienen al público con la sonrisa de oreja a oreja.
Los números musicales son un deleite al oído y a la vista. Las actuaciones en general están muy bien. El diseño de iluminación es de resaltar, dando marcos y tintes; creando ambientes que enmarcan cada escena.
La dirección musical corre a cargo de Jorge Romano, graduado de Berkeley School of Music en Boston. La puesta en escena es de Ricardo Díaz, con vestuarios de Rinna Keller y reproducción coreográfica de David Peralta.
“El violinista en el tejado” se presenta en el Teatro Del Parque Interlomas, los sábados, 8:30 pm y domingos a las 5:00 pm.
Los boletos se pueden adquirir en taquilla o por el sistema Ticketmaster.
